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Imagina que un cliente quiere que hagas el diseño de un folleto de varias páginas usando dos colores, verde y azul al estilo de Telefónica. Pero cuando se lo muestras, te dice: "Oiga ¿como quedaría en azul y naranja?" Tienes que cambar todos los colores, lo mas practico sería usar "Buscar y Reemplazar", pero si has utilizado porcentajes (un 20%, 40%, etc..) tendrás que cambiar uno a uno. Cuando terminas, el cliente te dice: "¿y si fuera violeta y naranja?". Alli ya comienzas a odiar al cliente, y argumentar que no quedaría bien, pero en fin... al final, cada vez que el cliente (o tu jefe) se le ocurra probar un color diferente te obligará a cambiar todo.
Para eso, lo mas simple es crear Estilos de Color. Creas, por ejemplo un estilo "verde" y uno "azul" con la tonalidad deseada. Puedes seleccionar un color y elegir "crear colores secundarios" pero ejemplo, cinco tonalidades más claras de cada uno. Y si el cliente te pide cambiarlo por otra tonalidad simplemente editas el Estilo de color, ¡magia! todos los objetos que eran verdes pasan a ser naranja en el documento, incluyendo los tonos secundarios. Puede cambiar la sveces que quiera.. cada vez que cambie el color, todo el documento cambia automaticamente. Y si no deseas que un objeto en partcular cambie, simplemente le aplicas el color directamente pero sin aplicarle ese Estilo de Color. Cuando modifiques el estilo, ese objeto no cambiará.
Y mas aun. Si seleccionas el estilo de color puedes convertir ese color (supongamos que sea un CMYK) en un color directo, como si fuera un Pantone. Aunque el color estuviera compuesto de diferentes tonalidades, saldrán impreso sólo como dos colores.
La parte negativa es que los Estilos ocupan espacio.Y hay versiones "alteradas" que tienen (entre otros) el problema de acumular muchos estilos. Y puede que un archivo casi vacio tenga cientos o miles de estilos, que hacen que el archivo sea mas pesado, ms lento para abrir, para guardar, etc, y puede causar problema de estabilidad.
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